La tierra es generosa y así lo demuestra con el pueblo de Uriondo, a pocos kilómetros de la ciudad de Tarija. Allí el suelo brota con enormes racimos de uva, fruto delicioso que en las manos trabajadoras de su gente se vuelve vino a la salud de la vida.

Las copas se llenan para brindar por una cosecha próspera. Uriondo concentra la mayor producción de uva de toda Bolivia y durante los últimos días de marzo le rinde tributo a este fructífero destino con su Vendimia Chapaca, una fiesta que se destaca en todo el Valle de la Concepción y que enaltece la labor de los productores locales.

La vendimia evoca la alegría del buen vino. Con música, ferias, artistas, comida y encuentros hacen de este evento una tradición que muchos esperan disfrutar. La ciudad se prepara con una agenda cultural y turística que año a año crece.

Los días templaditos, el ritmo en vivo de las chacareras y los exquisitos vinos artesanales, un producto que se ha convertido en la marca de esta región, son una propuesta imperdible.

El escenario central cada año recibe a reconocidos artistas folclóricos y las calles de Uriondo se llenan de gente que se da cita en este municipio atraídos por sus paisajes de viñedos y para degustar su amplia variedad de uvas que crecen gracias a las aguas del río Guadalquivir que bendice sus viñas.

Uno de los momentos más tradicionales de esta fiesta se conoce como la “pisa de uva”, chapaquitas vestidas con traje típicos bailan sobre un lagar de roble mientras pisan miles y miles de uvas, recordando el proceso de fabricación del vino, ese que se comparte con la familia y los amigos.