Estar bien es sentirse bien. Por eso es fundamental tomarse un tiempo para dedicarlo a los controles de salud, con los que se puede prevenir enfermedades que, en general, son reversibles con la detección temprana.

Si desea tener buena salud, es necesario realizarse periódicamente una serie de exámenes médicos. Según la edad, le compartimos la lista de los controles que toda mujer debería realizarse, recomendado por profesionales de la Organización Mundial de la Salud, OMS.

Entre los 20 y 35 años, iniciar una historia clínica que incluya antecedentes de la niñez y la juventud, medición de peso y estatura, además de la presión arterial. Si lleva una vida sexual activa, es importante realizar visitas periódicas al ginecólogo y estar pendiente de los cambios menstruales, mamas y genitales.
Una vez que inicia su vida sexual es vital realizarse un exámen de Papanicolau para detectar anomalías celulares, enfermedades de transmisión sexual e infecciones como el Virus de Papiloma Humano (VPH). Se sugiere hacerlo una vez al año. También se recomienda hacerse una mamografía a partir de los 40 años o un poco antes si existe antecedentes de cáncer en la familia.

A partir de los 30 años es importante medirse la presión arterial para prevenir enfermedades cardiovasculares y riesgo cardíaco, y los expertos recomiendan someterse a un control de colesterol ya que este es otro importante factor de riesgo de enfermedad cardiovascular.

Un diagnóstico de diabetes se detecta con un examen de sangre, y es recomendable hacerse la prueba después de los 25 años.

El cáncer colorrectal afecta por igual a varones y mujeres, es primordial hacerse el exámen a partir de los 50 años.

Un examen que se suele realizar a partir de los 40 años puede detectar el glaucoma, una enfermedad que va deteriorando la visión de manera gradual y que sin el tratamiento adecuado puede llevar a la ceguera. Se debería repetir cada cuatro años.

Una de cada cinco mujeres de más de 50 años padece de osteoporosis, que es el deterioro gradual de la masa ósea. Con una prueba de densitometría ósea se detecta y predice el riesgo de padecer esta enfermedad en el futuro.

Tome en serio la sabia frase ¨más vale prevenir que lamentar¨ y cuide su salud. Un diagnóstico a tiempo puede salvarle la vida.