Desde mediados de enero a principios de marzo, rituales, bailes y festejos tienen lugar en la provincia de Salta, que se convierte en un excelente destino para disfrutar de multitudinarios corsos y comparsas que compiten entre sí y que atraen a cientos de espectadores.
En la ciudad capital, Salta, la celebración inicia con el desentierro del diablo del Carnaval (Pujllay) que da vía libre a la alegría de sus habitantes en los corsos de los diferentes barrios, hasta que este sea nuevamente enterrado.
Durante meses, numerosas comparsas se preparan con coreografías que fusionan tradiciones hispánicas e indígenas, en las que se lucen atractivos carros alegóricos con diferentes temáticas.
Esta fiesta también se vive de un modo especial en el interior de la provincia. Bien al norte, se realizan los ¨Corsos Color¨ donde se destacan los bailarines de pim pim, danza ancestral que otorga a los desfiles un carácter ritual y antropológico, además de la presencia de comparsas tradicionales y caporales. Los juegos con harina y agua están a la orden del día dando rienda suelta a la alegría al compás de la música.
En Orán se presenta uno de los corsos más grandes de la provincia por sus variadas comparsas artísticas con trajes coloridos, carrozas alegóricas y conjuntos autóctonos con pimpines, bailes de Carnaval de los pueblos originarios Ava Guaraní y Andinos que incluye sayas, tinkus, morenadas, caporales, bailes peruanos y chapacos.
En Tartagal el ¨Corso Color¨ se vive en las noches de los sábados y domingos en el corsódromo de la avenida 20 de Febrero con la participación de comparsas que exhiben con orgullo danzas de los pueblos originarios, entre ellas sayas, tinkus y batucadas. Se elige a la reina del corso, los pimpines y se da a conocer la comparsa ganadora. Esta fiesta también invita a celebrar con juegos, baile, albahaca y harina.
Los tradicionales corsos salteños se encuentran entre las opciones elegidas para disfrutar y divertirse para quienes llegan hasta Salta en Boliviana de Aviación.
Traditional corsos from Salta
From mid-January to early March, rituals, dances and festivities take place in the province of Salta, which becomes an excellent destination to enjoy massive corsos and comparsas competing with each other and attracting hundreds of spectators.
In the capital city, Salta, the celebration begins with the disinterment of the devil of the Carnival (Pujllay) that gives way to the joy of its inhabitants in corsos of the different neighborhoods, until it is buried again.
For months, numerous troupes get prepared with choreographies that fuse Hispanic and indigenous traditions, in which attractive allegorical cars with different themes are shown.
This party is also lived in a special way in the interior of the province. Up north, the ¨Corsos Color¨ are performed, where the dancers of pim pim, ancestral dance that gives the parades a ritual and anthropological character, as well as the presence of traditional comparsas and caporales stand out. The games with flour and water are the order of the day giving free rein to joy and to the beat of the music.
In Oran, one of the largest corsos of the province is presented, it stands out for its varied artistic comparsas with colorful costumes, allegorical floats and autochthonous sets with pimpines, Carnival dances of the Ava Guaraní and Andean indigenous peoples that includes sayas, tinkus, morenadas, caporales, Peruvian dances and chapacos.
In Tartagal the ¨Corso Color¨ is lived on Saturday and Sunday evenings in the corsódromo on avenue 20 de Febrero with the participation of comparsas that proudly show dances from native towns, among them sayas, tinkus and batucadas. The queen of the corso, the pimpines and the winning comparsa is announced. This party also invites to celebrate with games, dancing, basil and flour.
The traditional Salta corsos are among the options chosen to enjoy and have fun for those traveling to Salta in Boliviana de Aviación.